Máximo Vega Ventura – Guardia Securitas en Huancavelica
Soy natural de Huancavelica donde la mayoría cultiva el arte y la cultura. Como violinista comencé muy joven en las actividades de la escuela. Siempre he sido muy curioso, por ello observaba a otros músicos e iba aprendiendo de ellos. Como danzante de tijeras empecé a los 15 años, también observando a los bailarines de mi pueblo. Más adelante un tío mío me enseñó la técnica y con mucha práctica la he ido perfeccionando.
Con Integridad, Eficacia y Servicio
Soy también un orgulloso guardia de seguridad desde el año 2013, con la responsabilidad de proteger el patrimonio del cliente en uno de los cerros más elevados del Perú, donde estoy destacado contribuyendo con trabajo y la confianza que me ha dado Securitas. Con Integridad, Eficacia y Servicio además de la experiencia propia de las prácticas y capacitaciones, he logrado prevenir los riesgos en mi puesto de trabajo, llegando incluso a ser ganador del Premio Valores Securitas al lograr salvaguardar el patrimonio del cliente frente a delincuentes armados. Ello ha hecho que permanezca día a día alerta y preparado para prevenir cualquier riesgo.
Con Integridad, Eficacia y Servicio
Danzante de Tijeras
Lo que más disfruto es la música por eso salgo a tocar durante mis días de descanso. Cuando me llaman participo de cumpleaños o en festividades como el baile de Santiago. Cómo danzante de tijeras también salgo a bailar en diciembre y enero que celebramos la adoración del Niño Jesús con la fiesta de Danza de las Tijeras, muy tradicional de nuestro Perú.
El regalo más hermoso, la familia
Vivo 15 años con mi compañera Maribel Yance Pacheco, con quien tengo cuatro hijos Jhamali Alessandra (9), Max Airton (7), Dalíz Xiomara (6) y el último es Boran Takeshi (2). Mi familia es el regalo más hermoso que el «Todopoderoso» me ha dado y las sonrisas de mis hijos y de mi esposa, con quien vivo muy feliz, me motivan a seguir superándome tanto como profesional de la seguridad, así como en el arte que cultivo.
A mis compañeros les digo que sigamos adelante, trabajemos con la honestidad, lealtad y con la confianza que nos brinda la empresa. Yo lo vengo haciendo para darle lo mejor a mi familia y porque quiero seguir trabajando para cumplir mi sueño de comprarme un violín de mejor calidad.